Noticias Unitarias Universalistas

Las noticias del tiroteo reciente en una iglesia unitaria universalista (UU) en Knoxville, Tenesí, EUA resultó, tanto preocupante, como triste y de una manera extraña, alentadora.

Fue profundamente preocupante en cuanto a que un alma humana pudiese enfermarse y retorcerse al grado de que este hombre sintió que debía matar a unos completos extraños solamente por apoyar las posiciones liberales religiosas y sociales. Este pistolero aparentemente sintió que podía culpar de todas las cosas que estaban mal en su vida a gente con puntos de vista progresistas. Los unitarios universalistas le resultaron blancos simbólicos convenientes.

Sé lo que es sentirse desalentado e iracundo, incluso lleno de rabia, pero me siento bendecido porque nunca me abrumó la enfermedad, la ira o el odio como para que ejercer la violencia me hubiera parecido una buena opción. Para los unitarios y universalistas en muchas partes del mundo este ataque contra nuestra fe resulta tan horrendo que casi escapa nuestra comprensión. Aunque estoy conciente de que para muchos de nuestros hermanos y hermanas en demasiadas partes del mundo este hecho de violencia, aunque terrible, no les resulta tan extraño o tremendo. Nuestra fe esperanzadora y amorosa existe en medio de la violencia, el desgobierno y la inconformidad política, en medio de la guerra, en medio de las circunstancias más profundamente peligrosas. Quizás estos unitarios y universalistas estén en mejor posición para entender lo que experimentaron nuestros hermanos y hermanas de Tenesí esta semana. En cuanto a mí, al contar con la fortuna de vivir en un lugar pacífico, esta noticia me resultó terriblemente conmocionante.

Un integrante de nuestra iglesia local de Edmonton sugirió que era para nosotros una especie de 9-11 (11 de septiembre), hay mucha gente en nuestras comunidades que se siente menos segura hoy en sus iglesias. Eso es preocupante.

Y desde luego, estos hechos dejan sentimientos profundos de tristeza por las víctimas, sus familias y amigos. Solamente la gente que ha pasado por esas experiencias puede hacerse una idea de lo que viven esas familias. Me siento bendecido por no haber tenido que hacer frente a esas situaciones nunca. Todo lo que puedo escribir es que siento una tremenda simpatía por los integrantes y amigos de la congregación de la Iglesia UU del Valle de Tenesí en el duelo que viven por sus pérdidas y en su búsqueda de maneras de volverse a sentir seguros en su iglesia.

Pero finalmente, ha habido también algunas cosas alentadoras. La primera víctima murió al salvar a otros del pistolero. Varias de las personas presentes corrieron hacia el hombre y lo sometieron a riesgo de sus vidas. Por todo Knoxville, las iglesias y congregaciones de diferentes tradiciones de fe han ofrecido apoyo real y testimonio público a favor de sus vecinos unitarios universalistas. La Asociación Unitaria Universalista de Congregaciones (UUA) ha enviado un equipo de expertos en situaciones de trauma para ofrecer consejería y apoyo. Mientras escribo esto, a 6 días del tiroteo, trabajan duro para preparar en su próximo servicio dominical una reivindicación de su hogar y una rededicación a sus valores.

Y lo que es más esperanzador, el Revdo. Christoper Buice y el presidente de la UUA Revdo. William Sinkford han emitido fuertes declaraciones de fe. Ambos han declarado que nuestro enfoque liberal no se verá cambiado o alterado por esta tragedia. Ambos hablan de amor y compasión, no de odio y venganza. En medio de esta tragedia, la gente encuentra nueva fortaleza y resolución. Encuentran sentidos positivos en este terrible hecho.

Quienes elegimos un enfoque liberal y basado en principios hacia la fe podemos esperar ser probados en nuestra fe, de vez en vez, aunque raramente la prueba sea tan conmocionante como lo sucedido el domingo en Knoxville. Es en momentos como este en los que recurrimos a los Principios ya nuestro entendimiento de la labor divina dentro de nosotros para salir adelante. Que nuestros hermanos y hermanas de Knoxville encuentren la fortaleza que necesitan en su momento de duelo. Que todos nos les unamos y encontremos nuevas razones para renovar nuestro compromiso con nuestra fe UU.

Revdo. Brian J. Kiely
Presidente del
Consejo Internacional de Unitarios y Universalistas (ICUU)

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